Fuentes oficiales del Gobierno Indio y el Gobierno turco confirman que sus fuerzas militares y policiales esta semana han sufrido sendas emboscadas de las guerrillas comunistas india y kurda respectivamente.
El martes pasado, una patrulla militar en el sureste de Turquía, en las regiones norte del Kurdistán, fué atacada por guerrilleros del Partido Comunista de Kurdistán (PKK) , causando 16 bajas a los militares, que respondieron al fuego pero se vieron forzados a replegarse. El PKK fué objeto de numerosos rumores a lo largo de meses pasados sobre un posible proceso de paz y el inicio de conversaciones con el gobierno de Tayip Erdogan, a través de su encarcelado secretario general Öcallan. Este extremo se vió descartado por la rápida acción del Gobierno turco, ilegalizando a todos los partidos kurdos moderados, y lanzando una campaña militar contra la región. En uno de los operativos de dicha campaña, las fuerzas represivas han sufrido esta emboscada.
Por su parte, en la India, en la región de Lalgargh, una columna de la Policía india fué atacada por elementos de vanguardia de una brigada del Partido Comunista de la India (maoísta). El resultado fué de entre 5 y 10 bajas entre los guerrilleros, por 27 policías muertos y 3 más heridos, como confirman las fuentes oficiales. Lalgargh es un estado muy disputado entre la guerrilla y las fuerzas gubernamentales por su localización estratégica, al ser una provincia llave entre las provincias del norte, (donde ha acumulado su fuerza e influencia la guerrilla) y el resto del país.
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