En cierta película de cine negro ambientada en los años 30 , hay una escena que me impresionó bastante por su subrealismo. Les explico : Club de blues en Nueva Orleans, típico hasta mas no poder, con su pianista negro y sus señoritos sentados en las mesas disfrutando de la música y de una copa. En un momento determinado irrumpen en escena unos mafiosos ametrallando a bocajarro a una familia entera cuyo padre parecía ser su objetivo, y acto seguido se marchan sin decir palabra.
Con todo el mundo tirado al suelo y en medio de un ataque de pánico , el bueno del camarero se pone de pie tras la barra y grita desesperado, en un vano intento por conservar la clientela "No se preocupen señores, que siga la música, que la fiesta debe continuar" .
Miren por donde que ahora nos acabamos de encontrar con una situación similar en pleno siglo XXI y muy lejos de aquel Nueva Orleans mafioso de los años 30. Resulta que la señora que encabeza la entrada, Ministra de Economía Elena Salgado , ha lanzado la idea de que el Gobierno va a verse obligado a introducir una reforma del sistema de jubilación total en virtud de la cual nuestro retiro del mercado laboral se producirá a los 67 años, esto es, se retrasará dos. Además, el sistema de prestaciones se endurecerá al valorar más años de los cotizados para totalizar la cuantía de la pensión a percibir.
A mí, esta señora y la portavoz del gobierno, Fernández de la Vega (sé lo que están pensando, ambas parecen casi un "remake" de la bruja de Blancanieves) me han recordado mucho a aquel camarero del club que gritaba que la fiesta debía continuar , en medio incluso de la carnicería de bienestar social, trabajadores y puestos de trabajo que es la actual crisis económica.
El Gobierno, mientras, afirma que sino se introducen reformas, el sistema de pensiones a largo plazo resultaría insostenible. Vamos, lo de la estrategia del palo y la zanahoria, o pasas por el aro, o será peor. No obstante, deben andar algo desmemoriados, porque acaban de gastarse el año pasado nada menos que 30 000 millones de euros de TODOS LOS CONTRIBUYENTES en "echarles un cable" a sus colegas los bancos y cajas. Además, uno podría pensar que las jubilaciones se están poniendo fatal y que cada vez se cobran peores pensiones, pero volviendo al sector de la banca, vamos a echar un vistazo a algunas cifras sorprendentes de las prestaciones que corresponderán a altos directivos de las entidades financieras(esas mismas que piden ayuda al Estado). Algunos ejemplos :
1-José Ignacio Goirigolzarri, 55 años, consejero delegado del BBVA, jubilado : pensión de 3 millones de euros brutos al año.
2-Alfredo Sáenz ,47 años, vicepresidente y consejero delegado del Santander : pensión asegurada que rondará un montante total de 80 millones de euros , al contado en cuanto se jubile.
3-Francisco Luzón , 52 años, director general del Santander : pensión asegurada que rondará los 53 millones de euros los primeros 5 años de su jubilación.
4- Emilio Botín : Presidente del Santander , cobrará 25,57 millones de euros suponiendo que decida jubilarse algún día.
5- Ana Patricia Botín, Presidenta del Banesto, con 31 años, tiene asegurada una póliza de jubilación de 21, 73 millones de euros al contado.
6- Matías Rodríguez Inciarte y Juan Rodríguez Inciarte, consejeros del Banesto : 59 millones de euros para los dos por su jubilación.
UN TOTAL DE 299 MILLONES DE EUROS A REPARTIR ENTRE SIETE PERSONAS.
En el club de blues, los mafiosos son esta burguesía repugnante que gana cada día más mientras nos revienta a trabajar , nosotros los pobres desgraciados víctimas del tiroteo, y el Estado el camarero que grita desaforadamente que la fiesta del capital debe continuar, aunque sea a costa de que nos jubilemos más tarde, y trabajemos más horas para que esta gentuza se llene sus bolsillos. Ya decían los europarlamentarios (sí, esa gente que cobra una media de 20 000 euros en dietas por cada viaje que hace a Bruselas, para, además, asistir solo a 1 de cada tres sesiones parlamentarias, aquellas en las que tocan las votaciones, y faltar a las consultivas) el Rey en su discurso de navidad (sí, el parásito por excelencia del Reino de España que no saldrá nunca en Generación Ni Ni) y Zapatero (el inútil incapaz de reflotar ni que sea mínimamente la economía del Estado) que iba a haber que apretarse el cinturón . El cinturón caballeros, descuiden que lo apretaremos, pero a ser posible, en vuestro cuello si nos dais la mínima oportunidad.
Ojalá, así lo digo y sin el más mínimo tapujo, que volviera la lucha armada que lideró el movimiento obrero en los años setenta y principio de los ochenta. Ahora más que nunca porque es la única manera de asustar a esta gentuza que no teme a nada porque no tienen ni el más mínimo escrúpulo.
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